El dia habia sido agotador… habiamos visitado medio Manhattan a pie y cuando ya no podiamos mas cogimos un Taxi que nos dejo en la puerta del hotel, yo iba con la cabeza echada sobre el hombro de Rafa, el parecia cansado pero al sentir mi cuerpo tan cerca noté como el pantalón casi le estallaba, ya en el taxi no pude resisitir meter disimuladamente mi mano por su pantalón, tenía la entrepierna ardiendo, su polla le iba a reventar el pantalón.
Mi cuerpo al sentir su linda polla tan erecta no tardó en reacciona, mi coño empezó a ponerse jugoso y mis pezones se querían salir de la blusa.
El viaje al hotel se nos hizo eternos pero por fin llegamos a la septima avenida, nuestro hotel estaba frente al Madison Square Garden, bajamos del taxi como dos locos dejando mas propina de la cuenta, Rafa tapaba su prominente polla con la mochila y mis pezones estaban tan erectos que nos indicaban el camino hacia la habitacíon de la sexta planta, ya del ascensor salimos casi desnudos y al cerrar la puerta no pudimos resistir nuestros instintos mas salvajes, Rafa que parecia un hombre tranquilo se habia convertido en una bestia que me rasgó la blusa dejando mis pechos a su suerte, su polla se había convertido en un misil listo para acabar en mi jugoso coño, acabamos en el suelo sobre la moqueta follando como dos salvajes, aun me pregunto de donde sacamos las fuerzas para aquella hazaña.
A Rafa no le falto por probar ningún centimetro de mi cuerpo, el iba mordisquando y lamiendo mis pezones, mientras yo rodeandolo con mis piernas no podia dejar de gemir, porque ya habia tenido tres orgasmos cuando él me dijo que su polla estaba a punto de explotar y los dos llegamos juntos al orgasmos…..alli nos quedaros abrazados en el suelo como dos adolescentes, despues de unos minutos Rafa se apartó abrió mis piernas y empezó a besar pubis depilado, el sabia que no habia nada que me gustara más que una buena comida de coño despues de habernos corrido no lo dudó ni un segundo y hundio su cara y metió su lengua entre los labios de mi sexo y empezó a comer como un loco, mis manos mientras tanto no se podían quedar quietas e hicieron revivir su miembro viril, yo le acariciaba sus huevos y su polla mientras él no paraba de lamer mi coño, cuando su polla estaba a punto de caramelo dejó de comer mi coño y acerco su polla a mi boca y no pude parar de comer hasta que sentí que volvería a estallar y le pedí que echara su leche sobre mis pechos, alli estaba yo en el suelo super exitada con su semen sobre mi cuerpo y sus manos la parte que tenía más bonita de su cuerpo masajeaban mis tetas y después pasó su lengua hasta dejar mis pechos sin una gota de semen ………
Había sido una noche bestial en una cuidad encantadora, mientras follaban no dejaban de escuchar los coches corriendo por la septima avenida, fianlmente se pegaron una ducha junta en plan relax y por los poros de Rafa y Ester fluía el amor, al salir de la ducha se acostaron abrazados y se quedaron dormidos pensando que habían tenido sexo en New York y que al día siguiente les quedaba por visitar Central Park, un lugar fantastico para vivir el amor.
