Relatos eróticos Marqueze. El Sexo que te gusta leer.

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Sexo: posiciones del Kamasutra para disfrutar

LAS MEJORES POSTURAS PARA HACER EL AMOR CON TU PAREJA

Primera etapa: la mujer esta agachada o arrodillada sobre su pareja, ella puede empezar la estimulación por un movimiento de vaivén vertical sobre el pene. 



Segunda etapa: La mujer bascula sus dos piernas a la derecha del busto de su pareja y empieza a dar vueltas.






Tercera etapa: La mujer se encuentra en posición inversa, de espaldas a su pareja y puede continuar la estimulación vertical agachándose hacia adelante para cambiar el ángulo de penetración. Ella continuará entonces el ciclo para acabar sentada cara a cara con su pareja.






La mujer se tumba sobre el hombre las piernas abiertas para facilitar la penetración. Una vez el pene bien asentado, ella aprieta las piernas para que los cuerpos de la pareja se superpongan en un alineación perfecta. La mujer puede entonces empezar la estimulación frotando su cuerpo lateralmente y horizontalmente contra el de su pareja.






A partir de la posición del misionero, la mujer aprieta les nalgas y comba su cadera y entonces ondula su cintura en un movimiento circular lateral y vertical.




Partir de la posición de Andromaca, la mujer bascula la espalda hacia atrás y desliza una pierna bajo la de su pareja. En el transcurso de la maniobra, ella tendrá cuidado en sostener el pene bien apretado en su vagina para evitar cualquier salida involuntaria. Ella podrá entonces ir y venir de forma transversal de izquierda a derecha para experimentar sensaciones nuevas.




El hombre se yergue sobre sus rodillas, la mujer tumbada sobre la espalda echa sus pies contra el busto de su pareja. El hombre se inclina hacia adelante para comprimir los muslos de la mujer contra sus senos.





El hombre se tumba sobre la espalda mientras su pareja se arrodilla encima de él y abraza sus muslos con los suyos. Ella controla la amplitud del movimiento vertical y horizontal para maximizar las sensaciones sobre su clítoris y sus paredes vaginales o para llevar deprisa el hombre al orgasmo .




A partir de la posición del misionero, la mujer acerca los muslos de su busto. Ella puede fácilmente variar les sensaciones y la profundidad de la penetración cambiando el ángulo de inclinación de sus piernas. Ella puede además fácilmente tomar apoyo sobre les nalgas de su pareja para aumentar la presión al nivel de la pelvis.





Los más
Levantando las piernas, la mujer favorece una penetración más profunda y puede controlar en parte las sensaciones.
El hueso de la pelvis del hombre viene directamente a frotar contra la vulva, favoreciendo de esta manera la estimulación del clítoris.
Los menos
La pareja de pie, la mujer se agarra a la espalda del hombre y entonces enlaza de la manera la más firme sus piernas alrededor de su cintura mientras él la sostiene por les nalgas y la espalda. La mujer puede además posicionarse de espalda a una pared, que le puede servir de apoyo sustentador suplementario.




El hombre está acostado sobre la espalda, las piernas levantadas. La mujer se sienta sobre la parte trasera de los muslos de su pareja, usando los pies del hombre como un apoyo. La pareja se sujeta por las muñecas para asegurar una buena estabilidad. El hombre puede entonces levantar su pareja con los pies para iniciar una estimulación vertical. La mujer puede además aportar una estimulación suplementaria haciendo ondular su pelvis en un movimiento lateral circular.





Sobre una superficie sólida y estable, la mujer se sienta sobre las rodillas de su pareja de cuclillas. Para mejorar la estabilidad, el hombre podrá apoyar la espalda sobre un soporte vertical y saliente como la esquina de la cama.
Tumbada sobre la espalda, la mujer toma una posición inclinada apoyando su cintura y sus nalgas sobre las rodillas y los muslos de su pareja. El hombre la levanta por la cadera para cambiar el ángulo y la profundidad de la penetración.




Los más
Posición profunda y cómoda para el hombre y la mujer.
El hombre puede liberar una mano para acariciar los senos y el busto de su pareja.
Los menos
Amplitud de movimiento limitado.
La pareja de pie, la mujer da la espalda a su pareja. El hombre la atrae contra él y la penetra por detrás. La mujer bascula totalmente hacia adelante y toma apoyo sobre un soporte bajo (cojines, mesa baja).




A partir de la posición del misionero o de la de la monta, la pareja bascula sobre el costado y con suavidad para evitar una salida inopinada del pene. 




La mujer se tumba sobre el costado las piernas plegadas en posición acurrucada.







El hombre se posiciona detrás y esposa los contornos del cuerpo de su pareja para penetrarla. Puede entonces fácilmente acariciar sus senos y su clítoris besándola en la nuca y detrás de las orejas.






El hombre está sentado sobre una silla. La mujer se sienta en amazona sobre uno de los muslos de su pareja y guía al pene hasta la apertura de la vagina. Una vez el pene introducido, ella podrá contraer sus músculos vaginales para guardar la penetración, y evitar les salidas inopinadas.





Tumbada sobre la espalda, la mujer pliega sus piernas en posición del Loto mostrando de esta manera su vagina de forma amplia abierta a su pareja.





Es la posición la más conocida, universalmente del gusto de los principiantes como de los más experimentados, el hombre se tumba entre las piernas de su pareja.





Variante : Varios cojines puestos bajo les nalgas de la mujer permiten una penetración más profunda cambiando el ángulo de inclinación de la vagina.



El hombre está sentado sobre el borde de la cama o sobre una silla. La mujer le da la espalda antes de sentarse sobre sus muslos. Una vez el pene en ella, ella puede entonces agacharse hacia adelante para llegar a una posición de equilibrio y balancearse a lo largo del pene. Para estabilizar la posición, la mujer cogerá apoyo sobre las rodillas del hombre que la sostendrá por los senos.





La mujer tumbada sobre la espalda, ligeramente sobre el costado, apoya sus piernas sobre la cadera de su pareja. El hombre puede entonces guiar su pene para penetrarla con suavidad. Ella deberá entonces comprimir los muslos para conservar el pene bien asentado y maximizar les sensaciones .






Los más
Una posición original para hacer el amor con suavidad, sin prisas.
Recomendado para el amor tántrico.
Los menos
Amplitud y profundidad de movimiento limitadas.
Riesgos de salida involuntaria si el pene
Tumbada sobre la espalda, la mujer lleva sus nalgas sobre el borde de la cama y aprieta con sus piernas la cintura de su pareja. El hombre se arrodilla sobre el suelo para penetrarla guardando la verga horizontal, paralela al eje de la vagina.





Variante : El hombre puede estar de pie mientras la mujer se tumbará sobre un escritorio o una mesa .

 La mujer da la espalda a su pareja y puede según su deseo sentarse sobre él, los pies sirviendo de apoyo, o bien arrodillarse por ambas partes de las caderas de su pareja, esta última posición favoreciendo una más gran amplitud de estimulación. 



La mujer a cuatro patas se hace penetrar por detrás por el hombre erguido sobre sus rodillas. 



Variante : La mujer puede hacer que la posición sea todavía más cómoda usando varias almohadas
  para tomar apoyo sobre sus codos.



La mujer tumbada sobre la espalda abre de forma amplia las piernas, el hombre posiciona una pierna entre las de la mujer y la penetra de costado, tomando apoyo sobre su brazo opuesto. Puede aumentar la estimulación frotando su muslo contra el clítoris.





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